El uso de la seda dental para niños es fundamental para lograr una adecuada salud dental. La seda permite llegar a espacios en donde el cepillo no llega, por esta razón es importante que haga parte de la rutina de higiene bucal a temprana edad para crear el hábito.
Algunos de los beneficios de la seda dental:
- Elimina los restos que se adhieren a los dientes y encías entre medio de los dientes
- Pule las superficies de los dientes
- Controla el mal aliento
¿Cuál es la edad ideal para enseñarles este hábito?
Normalmente se recomienda que cuando tu hijo tenga alrededor de 6 años es cuando debes enseñarle este hábito. Es posible que a esta edad aún no tengan la destreza necesaria para utilizar el hilo dental, por esta razón es bueno empezar con los flossers.
Es necesario que les enseñes cómo usarlo, más adelante serán ellos solos los que, bajo nuestra supervisión, deberán usar la seda dental.
¿Cómo enseñarles a usar el hilo dental?
Primero debes cortarle un trozo de seda de 30-40 centímetros y se lo enrollas en los extremos del dedo corazón de cada mano. Indícale que debe dejar una pequeña separación de hilo dental entre ambas manos, unos 5 centímetros.
Los dedos pulgar e índice son los que van a guiar los movimientos de la limpieza. A veces a los niños les puede resultar complicado controlar la fuerza. En ese caso puedes ayudarle con el uso de sujetadores de seda dental especiales para los niños o flossers.
Ahora lo que debes hacer es ayudarle a colocar la seda entre los espacios de sus muelas, pidiéndole que haga una ligera presión hacia abajo y en zigzag, para que la seda se introduzca hasta que obtenga una forma de C.
A medida que vamos cambiando de espacios interdentales se debe de ir soltando la seda enrollada en el dedo corazón para ir cambiando a trozos de seda dental limpias. Es recomendable que realices este ejercicio con tus dientes al mismo tiempo que le enseñas, así entenderá más fácil cómo debe realizarse correctamente.
Una vez realizada la misma operación en todos los espacios dentales, se recomienda enjuagar la boca con agua o enjuague bucal infantil, siempre que este último haya sido recomendado por el odontopediatra.
Enseñar a los niños hábitos saludables ya sean referentes al cuidado de su salud oral, como de su alimentación u otros aspectos, es una de las tareas fundamentales de los padres y la cual debe iniciarse cuanto antes.
Iniciar el aprendizaje del cepillado dental a una edad temprana puede ser un factor clave para la correcta salud bucal del adulto. Cuanto antes el niño se familiarice con el cepillo de dientes y aprenda que debe cepillarse los dientes después de cada comida, mejor. Cambialo todo con una con tu sonrisa, cuídala con los productos de Fluocardent Fluo Kids.